En la cantidad de tiempo que es necesario invertir en un tratamiento de ortodoncia, es muy posible que, al menos en una ocasión, uno deba enfrentarse a una emergencia que acabe en una visita al Ortodoncista. Hay muchos imprevistos que pueden ocurrir en cualquier momento; quizás uno de tus brackets te provoque una aguda molestia súbitamente, o desplace un diente de una forma indeseada. En la mayoría de los casos, tu Ortodoncista te habrá pertrechado con unas nociones básicas que te permitan identificar problemas como un golpe o un alambre puntiagudo, y actuar armado con la muy útil cera.